El objetivo principal del tratamiento es:
- Hacer que los episodios sean menos frecuentes e intensos.
- Ayudar a que usted se desempeñe bien y disfrute la vida en casa y en el trabajo.
- Prevenir la autoagresión y el suicidio.
MEDICAMENTOS
Los medicamentos son una parte fundamental del tratamiento del trastorno bipolar. Casi siempre, los primeros medicamentos utilizados se denominan estabilizadores del estado de ánimo, los cuales le ayudan a evitar los altibajos en el estado anímico y los cambios extremos en la actividad y el nivel de energía.
Con medicamentos, es posible que empiece a sentirse mejor. Para algunos, los síntomas de manía pueden sentirse bien o se pueden presentar efectos secundarios de los medicamentos. Como resultado de esto, usted puede verse tentado a dejar de tomar sus medicamentos o cambiar la forma como los está tomando. Pero dejar de tomar sus medicamentos o tomarlos de la manera incorrecta puede provocar que los síntomas reaparezcan o que lleguen a ser mucho peores.
Los miembros de la familia o los amigos pueden ayudarle a tomar los medicamentos de la manera correcta. Además, pueden ayudar a verificar que los episodios de manía y depresión sean tratados tan pronto como sea posible.
Se pueden ensayar otros medicamentos, como los antipsicóticos o los antidepresivos.
Las visitas regulares con un psiquiatra para hablar acerca de sus medicamentos y los efectos secundarios son necesarias. Los exámenes de sangre a menudo también son necesarios.
OTROS TRATAMIENTOS
Se puede usar la terapia electroconvulsiva (TEC) para tratar la fase depresiva o maníaca del trastorno bipolar si no responde a los medicamentos.
Los pacientes que están en la mitad de episodios maníacos o depresivos posiblemente necesiten permanecer en un hospital hasta que su estado anímico se estabilice y su comportamiento esté bajo control.